Hace algunos días atrás me puse a recordar compañer@s del colegio, ya que ciertos momentos no son tan buenos...hay que ir en busca de buenos momentos.
Recuerdo que cuando estaba en los primeros grados de primaria me enfermaba de los bronquios y el punto fijo para prestarme cuadernos era un cuasivecino y compañerito de salón, aquel que vivía a unas cuatro cuadras de mi casa, el de chompita que parecía oveja, mejillas rosadas, labios rojitos y cabello castaño claro jaja, si uno de eso chiquitos que puede llamar la atención de una niña de 7 ú 8 años maso maso.
Recuerdo que cuando iba a prestarme cuadernos con mamá yo me escondía jaja cosas de niña tímida, muy de lo contrario era una de las compañeritas que solía tener, una era muy noble Mxx y la otra era un Samuray era de papás de ascendencia japonesa, las tres eramos fijas a la hora del recreo, claro después de que me aclimatara ya a la escuela, jugabamos juntas, recuerdo que aquella amiguita Samuray a quien llamaré uhm Koriyu también vió que a aquel niñito "R" era simpaticon y para ser una enana de 7 ú 8 años era de armas tomar un día sin mas ni más le chanto un beso al pobre "R" jaja lo jaló de la chompa y se lo dió, por cierto una señora media japonesa en el trabajo me la hace recordarla jaja. Koriyu estuvo parte dela primaria con nosotras luego se fué a Japón con sus padres, de ahí en adelante las cosas cambiaron, Mxx y yo fuimos creciendo y separándonos poco a poco, ella fué absorvida por chicas que ya andaban en otra onda y yo me fuí también con otras con las cuales tenía mayor compatibilidad...
Bueno hoy como cuando era niña digamos que toqué el timbre de una casa y me fuí corriendo hay locuras y locuras que es bueno hacer de vez en cuando :)
quizás algún día.
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